Cuando, con apenas 16 años, Felipe Morales Rodriguez ( O Barco de Valdeorras 1998 ), entró en el gimnasio que dirigen los hermanos Juan y Luis Pardo para aprender a defenderse se encontró con el Boxeo, el cual, con el paso del tiempo eclipsaría otras facetas deportivas que el adolescente valdeorres tenía por aficiones juveniles. «En un principio la idea de empezar en el boxeo fue la de saber defenderme, pero poco a poco me fui enamorando de este deporte y dejando de lado otros como el fútbol o el tenis para centrarme únicamente en él».
Él mismo me comenta que sus comienzos boxísticos datan de tiempos juveniles. «Empecé a punto de cumplir los 16 años con mi entrenador de siempre, Juan Pardo «.
La serie de competiciones pugilísticas enlazadas bajo el epíteto Velada Concello Do Barco, que actualmente persiste en su novena edición, fueron algunos de los cursos de aprendizaje donde el joven vecino de Valdeorras memorizó el abecedario del deporte de los guantes que, en la actualidad, le reconoce con el sobrenombre de la Joya Valdeorresa.
» Actualmente llevo 7 peleas con 4 victorias y 3 derrotas. Mi primer combate fue, más o menos, un año después de empezar a entrenar, contra un compañero del Mamba Gym, ambos debutábamos y fue un combate bastante bueno e igualado pero que se acabó yendo para su lado «.
Sigue desglosando los pasos dados en su progresión bajo la tutela deportiva de los hermanos Pardo. » El siguiente compromiso llegó en el campeonato Gallego de Promesas en el que una vez más salí perdedor pero con muy malas sensaciones en cuanto al boxeo que hice. Después de estos dos combates llegó mi primera victoria, seguida de una derrota ante el actual campeón gallego promesas, Dani Regueira, hice un buen combate con muy buenas sensaciones ante un rival de gran categoría como es Dani y, aunque perdí, salimos contentos del combate. Con estas dos últimas lides me empecé a encontrar cada vez mejor encima del del cuadrilátero compitiendo hasta el día de hoy donde llevamos tres victorias seguidas, la última de ellas en el Barco de Valdeorras, mi casa. Aunque los inicios no fueron demasiado buenos empezando con varias derrotas, ahora estamos en un momento muy bueno y cada vez me encuentro mejor sobre la lona, escuchando más a mis entrenadores en la esquina e intentando demostrar el mejor boxeo que puedo dar «.
En la imagen cedida por Lolo López Vila, el árbitro iza el brazo triunfador de Felipe Morales del Club Kickboxing Valdeorrras, en su combate con el prometedor Eneas Valverde del Rebouras Team de Vigo.
Aunque su cita ineludible y primordial es con las aulas en las que estudia Biología, el boxeo absorbe toda la atención que el joven estudiante dedica al deporte, y procura asimilar consejos de los diferentes expertos que va conociendo debido a los obligados desplazamientos que le exige su carrera académica.
«Al margen del boxeo en cuanto a lo deportivo como ya dije no hago nada más, ahora estoy estudiando biología en Santiago y entrenando con Juan Mera. Desde que empecé he ido aprendiendo de muchos entrenadores diferentes llevándome un poco de cada uno de ellos. El primer año de universidad lo hice en Coruña, fui cambiando entre diferentes clubes hasta que llegue al lugar en el que me sentía más cómodo y que me trataron como uno de la casa, el club de Iago Barros del que aprendí mucho y tengo mucho que agradecer tanto a Iago como a sus alumnos. El siguiente año ya me desplacé a Santiago donde he estado y estaré entrenando con el que recientemente se coronó como Campeón de España profesional de Kick Boxing, Juan Mera, en el club CAMM, sin duda una gran persona que siempre está ahí para ayudarte y enseñarte todo lo que sabe, es un placer poder tener a alguien así para enseñarte «.
Pero su base y origen deportivo persistirá siempre, tanto en su mente como en el tiempo, en el Club Kick Boxing Valdeorras. » A pesar de los grandes entrenadores que me he ido encontrando mi casa siempre estará en el club Kick Boxing Valdeorras donde los hermanos Juan Pardo y Luis Pardo me han enseñado una base genial para poder ir aprendiendo y siempre es un placer entrenar allí y escuchar sus consejos, se lo debo todo, entrenaría con ellos siempre, a menudo viene la morriña «.
El futuro licenciado en Biología por la Universidad de Santiago de Compostela, del que espero que también consiga el Doctorado en Boxeo, se siente arropado por su entorno en las distintas facetas que atraviesan su carrera vital y así lo agradece. » En cuanto a mi familia, aunque no les guste demasiado la idea de que compita, siempre me han apoyado. De hecho cuando no tenía muy claro si empezar o no fue mi madre la que me dijo que fuera y también son mis padres los primeros en preocuparse sobre cómo me ha ido el combate cuando compito «.
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