El minuto de silencio en memoria de Luis Torrado Treus, y la entrega de una placa conmemorativa de la efeméride a los progenitores del recordado entrenador, marcaron el momento más emotivo del acto que se llevó a cabo en el Pabellón Municipal de Barraña.
El primer combate del evento boxístico, reunió sobre la lona boirense a los jóvenes Rubén Haba del club local Torrado Treus y a Aarón Romero del Club de Lucha Noia. Combate igualado, que se resolvió con victoria a los puntos del pueblense Rubén Haba.
En segundo orden de combate, ocuparon sus respectivos rincones el debutante local Hugo Vila y Marcelo Garrido del Club Pibe Sanxenxo. No tuvo suerte en su estreno el pupilo de José Antonio Fernández, que perdió por RSC en el tercer asalto.
Otro de los debutantes del Club Torrado Treus fue Adrián Fernández, al que le tocó en suerte cruzar guantes con el boxeador del Club de Lucha noies Adriano Fentanes. El nuevo ídolo local supo adueñarse del apoyo y aplauso de sus incondicionales dominando una contienda, que el director de combate decidió detener por RSC.
La cuarta lid de la reunión pugilística la protagonizaron las féminas Loreo Murgoitio del Flow Combat y Clara Millares de la Escuela de Boxeo El Canario. En juego, el cinturón gallego de de la categoría tan en boga actualmente, como es la de neoprofesional. Competida lid con intensos cruces de guantes y golpes duros – se utiliza vendaje duro en esta categoría – donde la ribeirense perdió por puntos frente a la eibarresa Lorea Murgoitio «quien mostró mas tablas y definición en su boxeo», según comentó el técnico Israel Benitez Somoza una vez finalizada la velada boirense.
Tras la lid de categoría femenina, tomarón la lona del cuadrilátero por campo de batalla Adrián Garrido de la Escuela de Boxeo Atlántico Brabox 76 y Manuel Castro del Club de Lucha Noia. Este último se hizo con la victoria en un «buen combate con bastante espectáculo, ante un buen rival, guerrero, que iba hacia delante» según declaró el boxeador herculino Garrido quien, a pesar de haber sido derrotado, añadió haber tenido «buenas sensaciones en el primero y el segundo con más apuros en el tercero y, a mi parecer, el resultado tenía que haber sido mío».
Y entrando en el apartado de los guantes encordados y torso descubierto comentar que, en el combate de semifondo, el flamante profesional caboverdiano nacionalizado español Wilson Tavares Sousa, dirigido en la disciplina boxística por la batuta de Manu Míguez, volvió a repetir triunfo por puntos ante el experimentado nicaragüense Joel Sánchez afincado en Cataluña y asistido por miembros del club Torrado Treus. La «pantera caboverdiana» llevó las riendas e iniciativa del combate, y supo inclinar la decisón arbitral hacia la esquina del Turbo Box orensano.
El combate estelar lo protagonizaron el experto nicagüense Alexander Zedelón – asentado en Cataluña y dirigido en la esquina por el Club de Contacto Torrado Treus al no estar presente el manager o entrenador asistente – y el hispanodominicano del Club Cidade de Lugo Wilker Faña Guerrero. El aguerrido boxedor de la Ciudad Amurallada salió dispuesto a poner fin lo más pronto posible a su estancia sobre la lona boirense. Ya en el primer asalto, el veterano púgil afincado en tierras catalanas sufrió un corte en el rostro, lo que propició el ko técnico decretado por el director de combate en el segundo asalto, casi al mismo tiempo en que la toalla volaba desde la esquina del nica.
El Kick Boxing Valdeorras rindió el primer homenaje en nombre del boxeo gallego a Luis Torrado Treus en diciembre de 2019. En el fotomontaje cedido por Juan J. Pardo, el homenajeado figura primero por la izquierda durante un Curso Gallego de Entrenadores Nivel 1 y 2, acompañado por José Antonio Fernández, Javier García, Israel Benítez, Manuel Suárez, Jorge Cendán y Pablo Chacón entre otros.