< Me voy con un mal sabor de boca . . . >. Con estas palabras dirigidas al periodista Pablo Gómez de La Voz de Galicia, Marta Brañas Rumbo ( Arteixo 1985 ) puso fin a su periplo pugilístico. Un periodo que comenzó < en el año 2003, como pasatiempo. Hasta que se transformó en una profesión al entrar en la selección española>.
Durante varios años compitió dentro de la categoría aficionado alcanzando 3 medallas de oro en los campeonatos estatales y formó parte de la selección femenina española. Debutó como profesional en el año 2015 en Méjico. En el corto espacio de 22 días la púgil gallega derrotó a la también debutante Melissa Murrieta ( 0 – 1- 0 ) por ko técnico; se impuso por el mismo resultado en su segundo enfrentamiento a Cristina Sarmiento (0 -2- 0 ), quien también hacía su segundo combate; y redondeó su estancia en el país azteca, al infligir a la boxeadora de Sinaloa Guadalupe Bernal ( 0- 6 -0 ) la quinta derrota antes del límite de su carrera profesional.
Tuvieron que pasar 4 meses desde su regreso de Mejico, para que se presentara como profesional ante sus paisanos de Arteixo venciendo por ko técnico a la colombiana residente en Petrer ( Alicante ) Katherine Quintana ( 0 – 13 – 1 ). Al mes siguiente se imponía por ko técnico, en La Coruña, a la marroquí afincada en Málaga Aouatif Al Kallaci ( 3- 5- 1 ), dentro de un combate que sería la antesala del campeonato de España.
Marta Brañas volvió a sufrir para vencer por puntos, en la revancha, a Maribel de Sousa.
En diciembre del 2015 la Federación que preside Martin Galan, y el Comité de Boxeo Femenino que dirigía la boxeadora Jenifer Miranda, conceden al promotor Chano Planas el beneplácito de organizar el primer campeonato de España de boxeo femenino. Será el del peso mosca. Dentro de una categoría sin estructurar y con total ausencia de escalafón o ranquin oficial, se elige como co – aspirante a la púgil de Badalona Maribel de Sousa ( 1 – 9 – 0 ). Mi punto de vista sobre este combate, que marcó un punto de inflexión en la carrera de la púgil de Arteixo, ya lo expuse en su día, y aquí va un resumen: <La nueva campeona aprendió a sufrir en un durísimo enfrentamiento con Maribel de Sousa, y tras 8 asaltos de sangre y sudor, se ciñó el primer Cinturón Nacional femenino de la historia del boxeo patrio. A tenor de las puntuaciones unánimes de los jueces-árbitros puede parecer que el triunfo fue fácil, pero nada más lejos de la realidad. La catalana muy fuerte y experimentada no le perdió la cara a la gallega y sus golpes rectos, con ambas manos, hicieron ver a la boxeadora de Chano Planas que el boxeo no es ningún paseo militar cuando se tiene en el rincón de enfrente a una buena púgil con hambre de victoria>.
Tras otros siete meses ausente de la competición, vuelve a boxear en Arteixo venciendo a Marija Fedotenkova por ko técnico. Y termina el año 2016 con dos victorias más ante Maribel de Sousa y a Katherine Quintana.
Hasta su despedida, anunciada hace un mes, y en 2 años de carrera profesional, la púgil gallega estuvo sin competir 14 meses durante etapas alternas. Aglutinó sus 9 combates en poco más de 10 meses de dedicación efectiva.
En diferentes notas de prensa se le citó como aspirante al mundial latino, al campeonato de Europa, e incluso al mundial super-mosca frente a la peruana Linda Laura Lecca. Pero siempre coincidiendo con periodos de inactividad, ya que nunca fructificaron esos planes. En el 2017 se le ofrece la oportunidad de alcanzar un título caribeño dependiente de la Asociación Mundial de Boxeo, con perspectivas de subir en el escalafón de dicha asociación que le permita optar a un título mayor, y acepta viajar a Panamá. Su rival sería la local Carlota Santos y el título a disputar el Fedecaribe del peso mosca que se encuentra vacante. Marta Brañas excede el peso en más de 600 gramos; hay distintas interpretaciones contractuales entre el promotor y el manager de Brañas sobre el combate; en resumen: se suspende una nueva oportunidad.
Esto enfada a la boxeadora de Arteixo que a su vuelta a España decide abandonar el boxeo. Aunque esta decisión ya la tenía tomada Marta Brañas de antemano. Desde su combate por el nacional con Maribel de Sousa, la boxeadora de Arteixo se dio cuenta que el boxeo no era un camino de rosas, sino una senda con muchas espinas. Eso si, quería retirarse con un título mayor, o al menos era lo que ella pensaba. Pero por muy bien que dirijan una carrera, un título importante no se consigue solo con las negociaciones astutas y sorprendentes del manager, sino que hay que seguir teniendo hambre de victoria. Y Marta Brañas se había saciado de esa gloria desde hacia tiempo. El esperpéntico viaje a Panamá es lógico que haya enfadado a la boxeadora y, también, que aproveche la ocasión para decirle adiós al boxeo. Pero no me parece correcto que se marche desproticándo de un deporte que ( habichuelas aparte ) le ayudó a alimentar su ego, encumbró su popularidad, aumentó su cultura viajera, y le reportó títulos y gran atención mediática, merced a unos combates muy bien escogidos y en momentos oportunos. Porque, aunque su poder de convocatoria en directo nunca fue muy importante, puede asegurarse que la repercusión de la velada íntegramente femenina en la que fue figura estelar, así como la obtención del título de España, trascendieron a muchas importantes cabeceras nacionales y alguna de allende las fronteras. Y estos 2 señalados eventos, no se le ocurrió organizarlos al promotor de otras boxeadoras, sino que fue un privilegio que su equipo técnico hizo presente a Marta Brañas.
La soldado Marta Brañas, obvió en su despedida toda mención hacia aquellos que la auparon hacia la gloria.